Te sientes atrapado en un trabajo que te nubla la mente? Si es así, que sepas que no estás solo. Una reciente encuesta ha demostrado que el 36% de los estadounidenses quieren deshacerse de su trabajo actual que le impide ser más creativo.
Sin embargo, dada la prolongada recesión económica, abandonar el barco o comenzar tu propio negocio puede no ser una opción. Si tienes que aguantar hasta el final en tu trabajo actual por ahora, busca maneras de hacer cambios que ayudarán a convertir el aburrimiento en creatividad. La investigación muestra que el cambio – lo que sea – mejora nuestro estado de ánimo y productividad. Aquí te sugerimos algunas maneras de lidiar con la rutina corporativa.
1. Varía tu rutina. Tu cerebro necesita estimulo. Trata de hacer tus tareas rutinarias de una forma diferente, en un momento diferente, en un asiento diferente o con diferentes personas.
Establecer una agenda. Si estás aburrido porque sientes que no tienes ninguna meta en el trabajo y sólo estás vagando sin rumbo por el día, sé más estratégico. Anota metas definidas y alcanzables para cada día, semana y mes y traza los pasos que vamos a tomar para llegar a ellos.
2. Trabaja desde casa. Cada vez más, las empresas permiten a los empleados trabajar fuera de las instalaciones de forma regular u ocasional. Trabajar en casa puede reducir el tiempo de desplazamiento, o aliviar las presiones de la vida laboral causadas por el cuidado de los niños, de los padres en edad avanzada o un cónyuge enfermo.
3. Cambia tu enfoque. Si tus responsabilidades son homogéneas o has desarrollado las mismas tareas durante todo el tiempo en que has estado en la empresa, pregunta a tu jefe si puedes alterar el tipo de trabajo que haces actualmente. Ya sea que estés sobrecargado de trabajo o completamente indiscutible, tu jefe va a respetar tu deseo de dominar algo nuevo.
4. Pedir ayuda al equipo. Incluso si no necesariamente odies a tus compañeros de trabajo, puedes refrescar tu perspectiva en tu trabajo y los aspectos de la misma que te llevaron a involucrar a diferentes personas. En los próximos proyectos, pide a los compañeros si te pueden echar una mano.
5. Variar viejos temas. Inyectar una nueva forma de pensar en tu trabajo. Tomar algo que ya has hecho o su equipo ya ha hecho y ver si se puede incorporar en un nuevo – o diferente – medio.
6. Dibuja un «mapa mental». Si estás estancando en un determinado proyecto, trata de encontrar una manera visual para salir de la rutina. Dibuja un diagrama con el tema principal en el medio de una hoja de papel, haz un círculo y pon 10 pequeñas líneas alrededor del círculo como en una rueda. Al final de cada línea, escribe 10 ideas o tareas que se relacionan con el tema central.
7. Brainstorming. Se reúnen un grupo de colegas innovadores y abordan temas juntos. No te preocupes por escribir solo las «buenas» ideas o separar los «definitelys» de los «quizás». Captura tantas nuevas ideas como puedas. Habrá un montón de tiempo para ordenar a través de ellos más tarde.
8. Amplía tus horizontes. Encuentra temas o áreas temáticas que te inspiran y te dan energía que te hace más fácil ser creativo. Podemos soportar casi cualquier cosa cuando hay algo en el fondo o fuera del escenario que nos apasiona.